El entrenamiento de la musculatura del suelo pélvico (EMSP) puede ser utilizado como prevención y como tratamiento.

La evidencia científica informa de que podemos encontrar diferentes beneficios en el uso del EMSP según el periodo en que se aplique. Si se utiliza en un periodo prenatal, es decir, como prevención a posibles alteraciones del suelo pélvico, se obtienen resultados estadísticamente significativos en el embarazo. No ocurre lo mismo en el post-parto. El efecto de esta prevención no se mantiene en ninguno de los períodos del post-parto (temprano, medio y tardío). En algunos casos, se ha observado una persistencia hasta el período post-parto medio; pero con un determinado EMSP suficiente como para fortalecer esta musculatura.

En cuanto al empleo del EMSP como tratamiento, no se encontraron evidencias suficientes como para afirmar que hay un efecto estadísticamente significativo en el periodo medio post-parto.  Sin embargo, sí se observa que el EMSP ofrece mejores resultados que no ofrecer ningún tipo de tratamiento o la atención habitual. Aunque, estos efectos no persisten hasta el periodo tardío post-parto.

Por lo tanto, se puede decir que el uso del EMS como prevención es eficaz, sin embargo, como tratamiento, no ofrece resultados a largo plazo. Por ello, se recomienda comenzar el EMSP antes del embarazo o durante éste como método de prevención de las posibles alteraciones del suelo pélvico.

Gloria González Medina

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